11 Pruebas de que la soledad prolongada es peligrosa para la salud

Todos a veces necesitamos privacidad para pensar un poco y tomar un descanso de los demás. Sin embargo, la soledad prolongada no solo es desagradable, sino que también es peligrosa para la salud. Sarah Shourd, una joven que pasó más de un año en régimen de aislamiento, compartió su experiencia aterradora en una entrevista y contó cómo el aislamiento afectó su mente.
Los científicos de todo el mundo estudian la soledad desde hace muchos años. Actúa de una manera diferente sobre cada persona, pero la mayoría de la gente presenta los mismos problemas cuando se ve obligada a pasar mucho tiempo en aislamiento.

1. Daño a la salud física



Los científicos han descubierto hace mucho tiempo que el aislamiento a largo plazo perjudica la salud humana no solo a nivel de la psique, sino también físicamente. Concretamente, las personas solitarias tienden a tener baja inmunidad, presión arterial alta y mayor probabilidad de desarrollar alzhéimery demencia senil.
Los científicos asocian este efecto del aislamiento con nuestros antepasados lejanos, para quienes la separación del grupo general planteaba un grave peligro. Y, aunque los peligros de la Edad de Piedra han quedado atrás, nuestro cuerpo sigue reaccionando mal a la soledad.

2. Inestabilidad mental



En 2008, Ian Robbins realizó un experimento. Encerró a varios voluntarios en celdas aisladas sin sonido durante 48 horas. El resultado se manifestó con bastante rapidez: los primeros síntomas fueron ansiedad, excesiva emotividad y todo terminó con pensamientos incoherentes e incluso alucinaciones.

3. Alucinaciones



Los participantes de ese mismo experimento tuvieron varios tipos de alucinaciones: desde puntos luminosos en el espacio hasta ardillas que marchaban con bolsas en la espalda. La mayoría de las alucinaciones fueron visuales, pero también las hubo auditivas y hasta táctiles, por ejemplo, uno de los participantes del experimento aseguraba que había recibido un disparo de escopeta.
Las razones de esto no han sido estudiadas completamente, pero los científicos tienen una teoría. El cerebro sufre de una falta de información proveniente del exterior. Pero el sistema nervioso continúa enviando señales al cerebro, aunque sean falsas. El cerebro, a su vez, trata de crear a partir de las señales falsas una imagen coherente, que tanto necesita nuestra psique. Como resultado, se producen alucinaciones.
Así, Sarah Shourd contaba: “Durante varios días escuché claramente pasos a lo largo del corredor, aunque no había nadie allí. Comencé a notar pequeñas luces con la visión lateral, pero desaparecían cuando giraba la cabeza. Una vez escuché un grito aterrador que duró una eternidad, y luego sentí que uno de los guardias estaba tratando de hacerme reaccionar. Entonces me di cuenta de que había sido mi propio grito”.

4. Mayor riesgo de suicidio



Quizás esto pueda parecer obvio, pero aun así cabe señalar que con un mayor grado de soledad, también aumenta el riesgo de suicidio. No importa si la persona sufre el aislamiento por razones externas o por problemas personales: las ideas de suicidio son más comunes entre las personas solitarias.
Esto llevó a los científicos a considerar la soledad como un problema, como una enfermedad que puede y debe ser tratada, especialmente si una persona se encierra en sí misma, viviendo en una gran ciudad.

5. Mayor riesgo de depresión



Los estudios han demostrado que las personas solitarias en su mayor parte se sienten menos felices y menos satisfechas, y son más propensas al pesimismo y a la impotencia.
Quizás esto se deba al hecho de que la soledad en sí misma reduce la autoestima, la eficiencia laboral y la capacidad de resolver los problemas. Además, estando aislada durante mucho tiempo, la persona pierde habilidades sociales, y se vuelve cada vez más difícil para ella relacionarse con los demás.

6. Mayor propensión al alcoholismo



La soledad es reconocida por unanimidad por los científicos como un factor que contribuye al desarrollo del alcoholismo. Además, también es un factor de apoyo, es decir, es más difícil para una persona solitaria resistirse al mal hábito.
En cada etapa del alcoholismo, cuantas menos conexiones sociales tenga una persona, tanto más difícil será para ella. Esto se debe a la falta de apoyo necesario y a la fuerte presión social.

7. Inmunidad reducida



Los científicos han descubierto que la soledad altera el sistema inmunológico a nivel celular. Las razones de esto son desconocidas, pero el hecho es que las personas solteras tienen más probabilidades de enfermarse que las personas socialmente activas. Quizás esto se deba al nivel general de estrés que aumenta en condiciones de exclusión social.

8. Alteraciones de la personalidad




Por el momento es solo una teoría, pero aun así. Algunos científicos suponen que la imposibilidad (o incapacidad) de satisfacer las necesidades emocionales básicas desempeña un papel crucial en el desarrollo del trastorno de personalidad esquizoide.
La imposibilidad de una comunicación normal conduce a un aumento de las emociones fuertes, se altera el patrón mismo del comportamiento social y, como resultado, el trastorno de la personalidad progresa.
Por supuesto que la soledad no puede ser la única causa de todos los trastornos mentales graves. Sin embargo, agrava enormemente los síntomas y contribuye al progreso de la enfermedad.

9. Mal dormir


La soledad lleva a dormir mal, dicen los científicos. Las consecuencias que siguen son un bajo nivel de energía durante el día, una sensación de fatiga constante.
Y lo que se altera no es la duración del resto, sino su calidad. Los científicos han asociado la soledad con la mala calidad del sueño, es decir, con micro despertares que una persona no nota, pero que como resultado tienen un fuerte efecto en el estado general y en la productividad.

10. Impacto negativo en los demás



Uno de los estudios interesantes ha demostrado que la soledad puede ser contagiosa. Si hay una persona que sufre de soledad cerca de ti, tu propia sensación de sentirte solo aumentará en un promedio de 52%. Suena paradójico, pero es así, porque incluso las personas que viven en grandes ciudades y llevan una vida social exterior bastante activa, también sufren de una sensación de soledad.

11. Incremento de la mortalidad



La soledad puede suponer un grave riesgo para la salud. El estudio de las personas en aislamiento social llevó a los científicos a la conclusión de que las mismas mueren prematuramente casi 2 veces más seguido.
El mayor riesgo de morir por la soledad es comparable a la tasa de mortalidad por fumar. Y la soledad es casi 2 veces más mortal que la obesidad.
El aislamiento social deteriora el sistema inmunológico, aumenta el riesgo de inflamaciones que conducen a la artritis, a la diabetes y a las enfermedades del corazón.
En la última década, la soledad se ha duplicado: el 40% de los encuestados dijeron que se sentían solos, en comparación con el 20% en la década de 1980.

Las consecuencias de una soledad prolongada

Sarah Shourd, quien pasó más de un año en una cámara de aislamiento, está recibiendo sesiones de psicoterapia. Su entrevista atrajo la atención del público a un problema como el encarcelamiento aislado. Actualmente está permitido en casi todo el mundo, a pesar de que la propia joven lo compara con la tortura física. Esto es lo que dice Sarah: “No necesitas golpear a alguien para lastimarlo. El confinamiento solitario no dejará rastros, pero sus consecuencias son serias y duraderas. Inmediatamente después de mi liberación, ni siquiera podía hablar con las personas, no podía mirarlas a los ojos, quería escapar de la sociedad. Y ahora sigo sufriendo de insomnio y tengo pesadillas. Creo que el aislamiento prolongado es un castigo cruel que debería considerarse equivalente a la tortura. Y exijo que esta práctica inhumana sea detenida en todo el mundo”.

Consejos para prevenir la soledad


La soledad se puede superar. Por supuesto que, si te encuentras en un aislamiento físico, necesitarás esforzarte mucho más, por ejemplo, las personas que han pasado muchos meses en celdas solitarias tienden a salvarse a sí mismas ejercitando su cerebro. Una matemática, encarcelada durante largos meses, resolvía ecuaciones en su mente, creaba ejercicios matemáticos y dictaba lecciones imaginarias.
Pero, en la práctica, la soledad de la “gran ciudad” es mucho más peligrosa para nosotros, pero también es más fácil de superar.
  • Prepárate para el hecho de que esto requerirá un esfuerzo consciente de tu parte. Pero valdrá la pena porque eventualmente serás más feliz y más saludable.
  • Admite el problema. Puedes comunicarte con docenas de personas, pero en la mayoría de los casos la soledad es un problema interno.
  • Detecta todas las manifestaciones negativas de la soledad. Esto te ayudará a juntar fuerzas para la lucha.
  • Piensa aquello que más te gusta de estar en compañía de otras personas. Esta será la primera etapa para construir o restaurar los lazos sociales.
  • Dedica tiempo y energía para desarrollar relaciones con las personas que te gustan y que te comprenden. Recuerda que las relaciones requieren de esfuerzo, al igual que todas las cosas buenas en nuestra vida.
  • Sé optimista. Esto atrae a otros y también te permitirá a ti ver tus problemas de una manera completamente diferente. Después de todo, tienes todas las herramientas necesarias para superar la soledad. O mejor aún: no dejarla desarrollarse.